Viajamos en el tiempo,
y lo hacemos a una ciudad del centro de Inglaterra, concretamente a Nottingham,
situada en la región de East Midlands. El motivo de este viaje no es otro que
recordar la época más gloriosa de los "Tricky Trees" (Nottingham
Forest) y las dos Copas de Europa conseguidas en las temporadas 1978/79 y
1979/80.
Con un Real Madrid
hexacampeón de Europa, un Bayern de Münich tricampeón y dos bicampeones en la
ciudad de Milán (AC Milán e Inter), aparecen los años de mayor dominio europeo
del fútbol inglés. Entre la temporada 1976/77 y la temporada 1981/82, tres equipos
ingleses (Liverpool, 3, Nottingham Forest, 2, y Aston Villa, 1) se alzaron con
la Copa de Campeones de Europa, el mayor título a nivel de clubes del Viejo
Continente.
La primera Copa de Europa…

La ida en el City
Ground de Nottingham dejó un resultado favorable a los "Tricky trees"
de 2 goles 0. La vuelta en Anfield se pintaba, cuanto menos, emocionante. El
partido fue decepcionante y terminó con el resultado de empate a 0. El Notts
estaba en octavos de final y allí le esperaba el AEK de Atenas que había
superado al Porto.
No tuvieron piedad de
los griegos los muchachos de Brian Clough pues le endosaron un 7-2 de parcial,
repartido en un resultado de 1-2 en el Olímpico de Atenas y un 5-1 en casa. Los
cuartos de final, casi impensables cuando se clasificaron para la Copa de
Campeones de Europa la temporada anterior, ya era una realidad.
En cuartos se medirían
a un duro Grasshopers suizo que venía motivado tras haber eliminado al Real
Madrid en octavos remontando un 3-1 del partido de ida. La eliminatoria se
descompensó en el encuentro de ida, cuando el Forest se impuso por 4
goles a 1. La vuelta en terreno suizo concluyó con empate a 1.
Sin hacer mucho ruido,
el conjunto inglés se había plantado en semifinales. El FC Köln era ahora el
rival a batir. La ida se disputó en el City Ground de Nottingham. Fue un
partido vibrante en el que ambos conjuntos dieron muestra de su poderío
ofensivo. Empate a 3 en el marcador y todo se emplazaba a tierras alemanas. La
vuelta se antojaba un partidazo y no decepcionó, pues los dos equipos tuvieron
ocasiones para llevarse la victoria pero fue el Forest, con un gol de Ian
Bowyer el que se impuso y se clasificó para la final en Munich.
El Nottingham Forest
inglés y el Malmo FF sueco disputan la primera final europea de su historia. En
las gradas, 58.000 espectadores presenciaron el partido. Tras una primera parte
en la que la ocasión más clara fue para el Forest, con un disparo de Robertson
al palo, ingleses y suecos se retiraban a los vestuarios soñando con la Copa de
Europa. Nada más iniciar el segundo tiempo, una jugada en banda de los “Tricky
Trees” terminaba en un centro al segundo palo que remataría al fondo de las
mallas Trevor Francis. No hubo más goles en el encuentro y el Nottingham se
alzaba con su primer título europeo. John McGovern era el encargado de levantar
la copa como capitán de aquel histórico equipo.
Pero el sueño no iba a acabar aquí...
Tras un verano en el
que el Nottingham perdió la Supercopa de Europa ante el Valencia (2-1 en
Inglaterra y 1-0 en España), se presentaba una nueva edición de la Copa de
Europa, en la que el conjunto inglés debía mantener el nivel de la edición
interior o, al menos, intentarlo.
Esta vez no fue tan
duro el primer sorteo y los pupilos de Brian Clough se vieron emparejados en
dieciseisavos de final con el Östers IF sueco. La ida en el City Ground terminó
con un resultado favorable para los locales de 2 goles a 0. La vuelta en la
fría ciudad de Växjö no dejó helados a los del Forest y sacaron un empate a 1
que les valía la clasificación a octavos. Allí, le esperaba el Arges Pitesi FC.
La eliminatoria frente
al conjunto rumano no fue más que un mero trámite ya que ambos partidos fueron
dominados y ganados por el Nottingham, venciendo en Inglaterra por 2 a 0 y
sentenciando la eliminatoria en la vuelta con un 1 a 2.
En cuartos de final,
la eliminatoria no fue todo lo bien que hubieran querido los aficionados del
Notts. En la ida, se cosechó la primera derrota en casa del Nottingham en Copa
de Europa. El Dynamo de Berlín se impuso por 0 a 1 y se llevó a Alemania un
resultado que podía servirles la clasificación para “semis”. Pero no fue así.
Con el coraje y la garra que caracterizaba a este equipo, los ingleses viajaron
a tierras teutonas convencidos de llevarse la victoria y pelear en las semifinales
por estar de nuevo en la gran final. Desde el minuto 1 al 90, el Forest peleó la
victoria y acabó imponiéndose por 1 gol a 3. Las semifinales eran ya una
realidad. El Ajax de Amsterdam, tricampeón de Europa por aquel entonces, era el
último escollo a batir antes de la ansiada segunda final.
Como todas las
eliminatorias de esta edición 79/80 de la Copa de Europa, el Nottingham Forest
debía disputar el primer partido en casa, en el City Ground. El estadio inglés
volvió a ser un fortín y el todopoderoso Ajax cayó derrotado por 2 goles a 0.
Dos semanas después, la vuelta en Amsterdam se presentaba como el partido más
importante de toda la edición. No defraudó. El encuentro tuvo momentos de
tensión y las gradas vibraron en todo momento. Finalmente el Ajax se llevó la
victoria por 1 gol a 0 pero no la clasificación. El Nottingham Forest volvía a
estar en la final y podía alzarse como bicampeón de Europa.
Enfrente tendrían un
duro rival, el Hamburgo SV. El club alemán había derrotado en semifinales al
Real Madrid, tras caer en la ida por 2 goles a 0 y remontar en Alemania con un
contundente 5 a 1. Precisamente la final era en el estadio español del Real Madrid,
el Santiago Bernabeú.
Nottingham y Hamburgo
tenían la posibilidad de alzarse con la Copa de Europa. Para los ingleses, la
segunda, mientras para los alemanes, hubiese sido la primera. El partido
comenzó con los conjuntos algo reservados y con tímidos acercamientos al área
rival. En uno de ellos, en el minuto 21, el delantero escocés de los “Tricky
Trees”, John Robertson, sacaba un disparo desde la frontal del área y alojaba
el balón en la meta de Rudolf Kargus. De ahí al descaso, pocas ocasiones por
parte de ambos conjuntos. El 1-0 valía y el Nottingham no iba a dejar penetrar
su arco en la segunda mitad. Pese a ello, el Hamburgo tuvo una clara ocasión en
la segunda mitad cuando estrelló un balón en el palo de la portería defendida
por Peter Shilton. Llegó el minuto 90 y el silbato del portugués Garrido
provocó el delirio en la zona “Roja” del estadio Bernabeú. De nuevo John
McGovern, capitán del Nottingham Forest más laureado de su historia, sería el
encargado de llevar a lo más alto la copa que les acreditaba, por segundo año
consecutivo, como el mejor equipo de Europa.
El año siguiente, el Nottingham Forest caería ante el CSKA de Sofía búlgaro en la primera ronda por un doble 1-0 en la ida y en la vuelta.

Daniel Grau @14Grau
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